viernes, 28 de marzo de 2014

El Secret de Victoria





   Uso bombacha. Lo mío es una declaración de principios. Bombacha es un término obsoleto en Argentina, ahora es tiempo de vedettina, tanga, colaless, tiro alto, tiro bajo. Pero no, yo no transo y digo que uso bombacha. En inglés se la llama underwear, palabra que suena a clandestino y me encanta. Pero aquí me gusta seguir diciéndole bombacha y mucho más me gusta cuando una sissy me pide que le ponga (o le baje) la bombachita. La entonación de la palabra en frío suena muy poco erótica pero suele calentar al rojo vivo cuando se la pronuncia en situaciones de alta tensión con la señorita a punto de ser feminizada o prostituida. 

   Esta prenda, casi vintage, nos hace sentir confiadas cuando nos desvestimos. A Mí nunca me interesó el nudismo total, soy cultora de la insinuación y apelo al frondoso imaginario sumiso para quitar la ropa con la mente y no con las manos. Lejos de la distancia cronológica de más de media centuria, aquello que usaban a diario nuestras abuelas y madrinas, hoy es atesorado y copiado, lo adornamos con el fetish actual y/o lo reciclamos.

   Desvestirse y dejarse arropar con aquello que suelo llamar los ornamentos de la profana hermandad: ahí está uno de los rituales favoritos que las Dóminas realizamos sádicamente. El morbo de un striptease que no llega al nudismo es altamente excitante y liberador. Mucho más si el striptease es inverso y un par de acaramelados ojos sumisos nos ven desvestidas para luego ir adornándonos para la gran Noche. Somos nosotras, curvilíneas Diosas y también las chicas cross las que calentamos las miradas desesperadas por imágenes paganas y a la vez nos automotivamos por la sedosidad de las telas que nos invitan a la acción.

   Casi nunca me quito la lencería durante el sexo. Me gusta combinar la inconmensurable franqueza de la belleza femenina con la sádica negativa a no exponer lo que todas exponen.  No sé cual será el secreto de Victoria pero mi secreto que hoy comparto con ustedes es que no sólo puedo dejarme el sombrero puesto sino también llevar una clásica lencería en la sesión más sádica, en la calle con los movimientos más sensuales y en la vida para descubrir la exquisita delicadeza de la femineidad. 

  



12 comentarios:

  1. Me ha encantado el post, enhorabuena, Sra. Yo por mi parte, la prenda íntima femenina que más me gusta es el culotte, e inmediatamente después un liguero, prenda que por su escaso uso práctico (o eso me han comentado algunas mujeres) se ha perdido. Pero veo muy sexy, tanto para una Dama como para una sissy, usar ambas prendas.

    A nosotros nos gusta la tienda Ann Summers, que también conocimos en Londres y ahora compramos por Internet.

    A sus pies.

    servus{Bastet}

    PD. En España, es el único país que decimos bragas a las bombachas jeje yo de hecho no sabía a que se refería hasta que abrí su blog. Me encanta aprender nuevas palabras. Saludos.

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  2. Había oído el termino bombacha y mi me gusta mucho el nombre, yo también soy clásica, me gusta llamarlas braguitas, ya sean culotes, tangas o bragas-faja. Ya sabéis chicas, "hagas lo que hagas, ponte bragas".
    Besitosss

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  3. woooooow no me alcanza el tamaño d emir bombacha para contener tanto orgullo y alegria que me genera este post. Me halaga completamente! un post que engloba perfectamente con lo que pienso de "intimidad". Muchas gracias, Mistress

    qershi

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  4. A mi el termino argentino de bombacha me encanta, no se, igual es mi espiritu sissy, pero a mi me suena ultra femenino. Es lo mismo que en castellano de España cuando dices bragas suena muy ordinario, algo casi despreciativo, pero si dices braguitas ya parece que estás en el septimo cielo femenino. A mi me encanta culotte pero en francés, me derrito...Besos Mistress

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    Respuestas
    1. La verdad es que bragas suena muy feo. Mis favoritos son los culottes. Eso creo que se dice igual en todos lados, y como dices, viene del francés.

      Saludos.

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    2. muy buen post ,soy un gran fetichista de las bombachas y no solo de las prendas si no tambien del uso de la palabra tanto para la mujer como para la feminizacion me provoca sensualidad y excitacion al instante , saludos , estoy llegando ala argentina este fin de semana esoeri conocerlos

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  5. Belleza y certeza entremezcladas en un habitrual articulo interesantisimo

    con afecto,respeto y sumision

    Commendatore

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    1. Gracias. Se armó con recuerdos de un viaje y con algunas anécdotas

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  6. soy cultora de la insinuación y apelo al frondoso imaginario sumiso para quitar la ropa con la mente y no con las manos
    Casi nunca me quito la lencería durante el sexo. Me gusta combinar la inconmensurable franqueza de la belleza femenina con la sádica negativa a no exponer lo que todas exponen. No sé cual será el secreto de Victoria pero mi secreto que hoy comparto con Uds. es que no sólo puedo dejarme el sombrero puesto sino tambien llevar una clásica lencería en la sesión más sádica, en la calle con los movimientos más sensuales y en la vida para descubrir la exquisita delicadeza de la femineidad.

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  7. Coincido, con tales pensamientos. SAVAGE!

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